La historia de La Tienda de Carmen


Hola, soy Carmen Nazar, y acá te cuento un poco sobre cómo empezó todo y la historia de mi querida tienda!


Todo fluye en armonía en un local en la esquina del pintoresco Pasaje Libertad en Recoleta. Desde sus grandes ventanales no hay quien no se quede admirando cada uno de los productos únicos que se pueden encontrar.


En "La Tienda de Carmen" podrán encontrar gran variedad de muebles antiguos previamente restaurados, diseños propios realizados a medida por expertos artesanos con quienes trabajo hace ya tres décadas.


Las lámparas, arañas, apliques, candelabros y todo lo referido a la iluminación, es con lo que más me diferencio, cada pieza ha sido diseñada y pensada aquí, dándole un toque diferente. Creo que la iluminación es súper importante y es en lo que más se destaca la tienda.


Me gusta mezclar y combinar diferentes estilos, creo que la diversidad de muebles antiguos lustrados, combinados con otros rústicos de maderas lavadas rubias, junto a otros muebles de caña de malaca y rafia entre otros con patinas, hacen que toda esa mezcla heterogénea den como resultado final un lugar acogedor, sencillo y con personalidad logrando un look descontracturado.


Mi objetivo tanto en la tienda, como en las decoraciones que realizo en diferentes sitios, es lograr que sea un lugar cómodo y cálido, creando un ambiente simple y actual pero a la vez clásico y elegante! 


Mis inicios se remontan a los años 90 cuando comencé a trabajar en "Renovation", una de las tiendas de decoración más conocidas en su tiempo de mis adoradas tias, hermanas de mi madre, Stella y Adriana Larroude y Carolina Ledesma de Miguens socia suya y una tía del corazón para mi. Allí trabajé durante 15 años - con algunos intervalos - y crecí en todos los aspectos de mi vida, aprendí desde hacer pátinas, diseñar muebles, atender a los clientes, llevar la contabilidad, hasta de electricidad, mientras tanto, estudié, me capacité y hoy tengo mi propia tienda hace ya una decada.


Desde que soy muy chica adoro la decoración y siempre en todas las casas que viví, que fueron muchas y en muchos lugares, me encaba ayudar a mi madre en cada mudanza y casa nueva a acomodar todo, ibamos a los cachivacheros para elegír los mueble que hacían falta, retapizábamos las sillas o sillones, pintábamos, arreglábamos todo lo que se había roto en la mudanza y en cada lugar, al día siguiente de haber llegado, estaba todo impecable gracias a mi madre y su magia!


Siempre me gustó la pintura y todo lo relacionado con el arte. En mis comienzos estudié durante un par de años pintura sobre porcelana, también estudie Historia del Mueble con Julio Arteaga durante 4 años.

Realicé un curso sobre Carta Pesta y Papier Mache con Martín Palacios. Hice la tecnicatura de Restauración en el Consejo de Mujeres, Instituto ABM y luego la carrera de Museología en la Universidad del Museo Social Argentino (UMSA).


Por último, tuve el gran honor de ser alumna y formar parte durante 10 años de un grupo muy reducido de alumnos y tuve el privilegio de ser alumna becada por mi gran maestro - en todos los aspectos - Silvio Goren. El me bautizo PATINATUTTI como sobre nombre, definicion genial como todo lo que nos decia, hacia y enseño!

En su taller aprendí restauración de cuadros, marcos, dorado a la hoja, porcelana, papel, lustre, muebles, esterilla, pátinas, etc. Tampoco puedo dejar de mencionar las clases de pintura en el atelier de Raquel Wullich, excelente artista y muy amiga de mi tía Stella, hermana de mi Padre. 


Mi especialidad es el reciclado, creo que cada objeto tiene una historia y a la vez no hay nada más actual que lo antiguo en un espacio moderno.


Mi tienda no está a la calle sino en un pasaje y eso me gusta porque el hecho de estar un poco escondida me ayuda a poder dedicarle un tiempo exclusivo a cada cliente que me visita y al conocernos puedo asesorarlos 

de acuerdo al estilo y personalidad de cada uno y a las necesidades que cada uno tenga, para así poder cumplirles!


El Pasaje Libertad es un sitio histórico, antiguamente eran caballerizas, luego fue un conventillo, hoy forma parte del patrimonio de la tan querida ciudad y nos visitan muchos turistas que se enloquecen con su encanto y lo lindo de su estilo italiano además de la diversidad de tiendas, hace ya muchos años que estoy y siento que somos una gran familia, cada uno en su rubro, se destaca y hace que sea muy pintoresco. Si no lo conocen, los invito a acercarse, no se van a arrepentir!


El estar en La Tienda hace que permanente conozca a personas llenas de luz y muy especiales que se cruzan en mi camino, no creo en la casualidad, creo que es sincronicidad! Agradezco a Dios, todos los días de mi vida el trabajar haciendo lo que verdaderamente me apasiona y el hecho de conocer gente tan maravillosa!


Los espero en mi casa y la casa de todos!


Carmen





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